Las condiciones climáticas y el medioambiente pueden provocar que algunas personas experimenten alergias estacionales durante cierta época del año. Estornudos, secreciones nasales, congestión o dolor de garganta son algunos de los síntomas que anuncian un padecimiento, el cual a veces se confunde con otras enfermedades, como un resfriado común, por ello las personas tardan en identificarlo.
Además pueden desarrollarse durante cualquier época del año, y existen algunos desencadenantes que las provocan.
El polen es uno de los principales. Estas partículas invisibles viajan por el aire y se concentran de manera más importante durante la mañana y en los días cálidos, secos y ventosos. Debido a su propia naturaleza pueden pegarse a la ropa de las personas y de esta forma entran en los hogares.
Aunque existen muchos más elementos en el ambiente que pueden ocasionar esta condición, el mayor reto consiste en poder identificar cuál es el origen del problema. Además no existe una cura definitiva.
Los ácaros habitan en almohadas, colchones, las alfombras y hasta los muñecos de peluche y son otros de los agentes que provocan las alergias estacionales, al igual que la caspa de las mascotas.
Aunque la mayoría de las personas asumen que el pelo de los animales de compañía provoca esta clase de síntomas en realidad son las proteínas que se encuentran no sólo en caspa, también en las escamas, la saliva y la orina las que generan estos trastornos en la gente.
Lo que sí se puede hacer es tomar algunas medidas para tratar de disminuir los síntomas. Para ello expertos de Dyson, firma especializada en productos de tecnología de limpieza y purificación del aire, ofrecen algunos consejos
- Evitar pasar mucho tiempo al aire libre en los días de alto nivel de polen.
- Mantener las puertas y ventanas cerradas en casa durante estos días.
- Aspirar la casa con un equipo de sistema cerrado con filtración totalmente sellada, al menos una vez a la semana.
Con este tipo de consejos será posible, al menos, reducir el número de desencadenantes de las alergias estacionales.
Fuente: Forbes