Los efectos secundarios temporales, como dolor de cabeza, fatiga y fiebre, son síntomas de que el sistema inmunitario se está acelerando, lo cual indica una respuesta normal a las vacunas y lo mismo pasa con las vacunas contra el covid-19. Dichas reacciones en nuestro cuerpo son normales y habituales.
Esto es lo que ocurre en su cuerpo: el sistema inmunológico se activa tan pronto el cuerpo detecta un intruso extraño. Los glóbulos blancos se dirigen al lugar, generando una inflamación responsable de los escalofríos, el dolor, la fatiga y otros efectos secundarios.
Esta rápida respuesta del sistema inmunitario que tiene a debilitarse con la edad, uno de los motivos por los que las personas más jóvenes reportan efectos secundarios más frecuentemente que los adultos mayores. Además, algunas vacunas provocan más reacciones que otras.
Dicho esto, cada cuerpo reacciona de una forma distinta. Si no sintió nada un día o dos después de recibir la dosis, esto no significa que la vacuna no esté funcionando.
Las vacunas también activan la segunda parte del sistema inmunitario, la que proporciona la protección real frente al virus al producir anticuerpos.
Fuente: AP