José Manuel Torres Cabrales, enfermero especialista en el área de atención COVID-19 en el Hospital General Regional (HGR) No. 01, Morelos, ha sido fiel testigo de la desesperación y angustia de cientos de pacientes con SARS-CoV-2, a quienes ha escuchado y brindado un servicio cálido.
En esta emergencia sanitaria ha observado y sentido –de primera mano– el temor, el miedo y el clamor de las personas enfermas con ese virus, muchas de las cuales han perdido la batalla.
Desde que comenzó la pandemia ha permanecido en el servicio COVID, en el que ha crecido y evolucionado profesionalmente, tanto en el conocimiento y aplicación de nuevos procedimientos, como en asesoría especializada.
En ese sentido, afirma que “en estos momentos la enfermería se ha convertido en una importante columna vertebral en esta contingencia, al trabajar de la mano con el gremio médico; pero además al ser la parte amorosa e incluso hasta espiritual para los pacientes”.
Para José Manuel al principio el COVID-19 sólo había dejado marcas físicas en los trabajadores de la salud, “conforme pasó el tiempo, ha dejado cicatrices en el alma, así como un mal recuerdo y situaciones difíciles de superar”.
A sus 35 años, hijo de una enfermera y con seis años de trayectoria ininterrumpida en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), afirma que por nada en el mundo dejaría de hacer lo que hace, sin importar que actualmente se esté a travesando por una pandemia.
Por lo único que ha “sufrido”, es el haberse distanciado de su mamá que padece enfermedades crónico-degenerativas. “Al momento de querer acercarme con ella, tengo que ser bastante cauteloso e incluso realizarme pruebas rápidas para estar seguro de no llevar el virus a su casa. Realmente, tengo miedo de contagiarla; es algo, que no me perdonaría”.
“Este virus es real y muy letal, ha afectado a muchas familias, por lo que pido a la población que se cuide. Que hagan caso de lo que ya se ha dicho hasta el cansancio: que tomen sana distancia, que usen correctamente el cubre bocas y que apliquen todas las medidas de prevención para no contagiarse y contagiar a los demás”, enfatizó.
“Los chihuahuenses deben estar convencidos de que los trabajadores de la salud estamos dando el cien por ciento para que los pacientes salgan adelante en esta pandemia”, añadió.