El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Chihuahua, informa que el consumo de bebidas azucaradas en exceso y de manera cotidiana puede acarrear múltiples problemas para la salud.
El refresco es una bebida saborizada con efervescente carbonatado compuesto de sacarosa, glucosa y fructuosa que se convierte en una fuente de energía concentrada, lo que hace que las personas que lo consumen sientan la sensación fugaz de bienestar, sin embargo, en cantidades elevadas ocasiona múltiples daños a la salud.
En “ocasiones especiales” las familias acostumbran darse determinados “gustitos alimenticios”, por ejemplo, comen platillos muy condimentados, fritangas, pastel y la mayoría de las veces acompañan todo esto con bebidas azucaradas, pero lo ideal es consumirlos con moderación para evitar poner en riesgo la salud, en especial los diabéticos, hipertensos, con sobrepeso, obesidad o gastritis”.
Lo ideal en estos casos es preparar aguas frescas, ya que aunque también se tiene que consumir con moderación, contienen vitaminas y minerales de frutas naturales, y la cantidad de azúcar se puede limitar por la persona que las prepara.
Para una buena hidratación, los adultos deben tomar entre dos y tres litros de agua diariamente, dependiendo de sus actividades diarias. Además de privilegiar el consumo de frutas y verduras ricas en este líquido.
El Seguro Social llama a los padres de familia para que desde casa enseñen a sus hijos y fomenten la cultura de beber agua natural e informen sobre el daño que causan los refrescos.
Hay que evitar consumir este tipo de bebidas industrializadas y elegir sobre ellas el agua natural, frutas y verduras para reponer los líquidos perdidos durante el día, de esta manera se podrán prevenir futuras enfermedades.
En los módulos PrevenIMSS, ubicados en las Unidades de Medicina Familiar (UMF), personal especializado ofrece información y orientación sobre distintos temas, entre ellos la manera de llevar una buena alimentación que incluye comidas y bebidas.