Este sábado 26 de abril, el Papa Francisco fue sepultado en la basílica de Santa María la Mayor de Roma, tras un multitudinario adiós al pontífice venido del “fin del mundo” que puso a los desfavorecidos en el corazón de la Iglesia católica.
Su sepelio, el primero de un papa fuera de los muros del Vaticano desde León XIII en 1903, ha puesto fin a 12 años de un pontificado marcado por la defensa de los migrantes, el medio ambiente y la justicia social.
El féretro del Papa Francisco recorrió las calles de la Ciudad Eterna en el papamóvil, pasando por lugares emblemáticos como el Coliseo. Cerca de 400 mil personas siguieron el recorrido y participaron en la misa funeral en la plaza de San Pedro del Vaticano. El entierro, en cambio, se celebró en la intimidad, con la presencia de familiares del primer papa latinoamericano.
La tumba, sencilla y de mármol italiano tiene como única inscripción “Franciscus” y estará abierta al público desde este domingo.
El fallecimiento del Papa Francisco generó manifestaciones de respeto y duelo en diversos países. En Argentina, su país natal, jóvenes realizaron vigilias en la plaza de Mayo frente a la catedral de Buenos Aires. En Tailandia y otros lugares también se llevaron a cabo homenajes.