La estrella de cine Tom Cruise descendió en rappel desde el tejado del Estadio Nacional de Francia y recibió la bandera olímpica, aportando una fuerte dosis de Hollywood a la ceremonia de clausura de los Juegos de París, en la que la capital francesa cedió el testigo a Los Ángeles, la próxima ciudad anfitriona.
La ganadora del Grammy, H.E.R., interpretó la banda sonora de “Misión IMposible” mientras Cruise realizaba su salto, provocando suspiros de los espectadores al caer desde 50 metros de altura al suelo del Estadio de Francia, en un final de la ceremonia que mezcló lo tradicional, lo oscuro y el brillo de Hollywood.
Luego recorrió las calles de París hasta tomar un avión que le trasladó a Los Ángeles, desde donde salta para caer junto al famoso panel de letras ‘Hollywood’, cuyas dos últimas ‘oes’ estaban convertidas en dos de los cinco aros olímpicos.
Tras el traspaso formal, inició la presentación de la banda californiana Red Hot Chilli Peppers en las playas de Los Ángeles Más tarde, se sumó la voz de Billie Eilish y la presentación de Snoop Dog
Para muchos la gran estrella del espectáculo fue la propia ciudad de la luz y el fabuloso telón de fondo que prestó a gran parte de la competencia
Fuente: El Economista